En este apartado se pretenden recoger algunas de las tácticas de enmarronamiento
más conocidas para que sepamos verlas venir y reaccionar ante ellas.
6.1. Dosificación del marrón (Progresive Brownning)
Esta es una técnica usual entre los browners experimentados y entre los brown
dispatchers.
La dosificación se da en varios pasos:
-
Primero el browner te deja caer un pequeño brown, que en realidad resulta
el señuelo, al que tú, normalmente deseoso de hacer puntos con tu jefe,
entras a todo trapo.
-
La realización del señuelo en general no tiene mucha complicación y cuando
estás cercano a acabarlo (o incluso habiéndolo ya acabado) tu jefe te dice
que no es tan simple como tú pensabas sino que además de lo que estás haciendo
necesitas ampliar por aquí y por allá, contrastar datos, ampliar conclusiones,
adaptarlo al formato estándar (que tú no sabías ni que existiera), y rellenar
un par de docenas de formularios para que todo quede conforme.
-
A pesar de todo, no te desanimas, piensas que es algo más complicado de
lo que tú habías previsto, te remangas, y te metes a la faena
-
A partir de ese momento, con cada duda que le vas a consultar a tu jefe
vas descubriendo más del pastel. En realidad te va contando poco a poco
todo lo que tienes que hacer, de forma que cuando te has dado cuenta ya
estás hasta las orejas en un marrón que te huele fatal.
6.2. Reunión enmarronadora (Flashing brown meeting)
Te llaman a toda prisa y te meten en una reunión de la que tú no sabes nada
y con la que no tienes nada que ver. (en el caso peor, la reunión ya estaba
comenzada desde mucho antes, y todo el mundo ya se ha puesto de acuerdo en
que tú eres el único que puede sacar las castañas del fuego)
Te cuentan una cosa que hay que hacer. En un principio es algo sencillo.
Aceptas hacerlo (piensas que no te llevará más de 20 minutos o media hora
a lo sumo).
Después, cuando ya no tiene remedio y no puedes dar marcha atrás, te cuentan
los detalles y te das cuenta de que te acaban de meter un auténtico marrón.
Agravante: Tú mismo has dicho que eso era muy sencillo y lo hacías en un momento.
Conclusión: Te has fijado el plazo de entrega, y además aunque te hartes
a currar no te lo van a reconocer (tú mismo has dicho que no te costaba nada)
Además si no eres capaz de resolverlo brevemente, te las dan por todos lados,
por inútil.
Este caso es parecido a un progresive browning, ya que se empieza a gestar
normalmente con una tarea o actividad que suele ser inofensiva, totalmente
inocente.
Es cuando parece que la tarea ha sido terminada y uno se siente eufórico
cuando el browner que nos la asignado (y en ese momento nosotros estamos en
esa fase de euforia que nos hace tan vulnerables) nos comenta la terrible
frase: "pues ya que estás aquí podrías..." "pues ya que
has terminado deberías mirarte..." o "pues ya que has aprendido
tanto con esto deberías..."
La velocidad y presteza con que suele caer esta frase, da lugar a que realmente
se pronuncie como "po-ya-que... ¡... brown!"
Es en ese momento cuando comprendemos la astucia del browner, el cual ha
ocultado vilmente una marrón de dimensiones variables con una tarea que no
tenía peligro alguno...
En ese caso, lo primero que se nos pasa por la cabeza es la familia del browner.
La mejor forma de defensa respecto a esta forma de presión es hacer ver que
realmente el marrón anterior no está tan acabado como el browner se cree.
Otra forma de esquivarlos es disponer de algunos marrones inexistentes con
un horario tal que sólo permita hacer esa primera tarea encubridora. En este
caso, se notará la decepción clara y contundente del browner, para darnos
pena... pero hay que recordar que "al enemigo ni agua".
6.4. Marrón por detrás (Back brown)
Te dan una tarea inofensiva y, al final, y ya de paso, te dejan algo en la
mesa, "que ya me harás cuando tengas tiempo", que es el
auténtico marrón. Tú como un pringado, aceptas los dos si darte cuenta de
la categoría del segundo.
|